sábado 5 de julio de 2008 (Continua)

Llega y antes de que articule palabra, apenas ha cerrado la puerta tras ella empiezo a desnudarla. Hago un seña con mi índice sobre su boca demandando su silencio. Su cuerpo tiembla. Sabe que algo sucederá.
Sin decir palabra le coloco un liguero, medias transparentes y tacos de largas agujas.
Falda minúscula que apenas cubre sus glúteos.
Los botones del frente de la blusa sueltos hasta la línea del pecho
Subo la falda un poco, agarrando fuerte sus nalgas
Mi boca muerde sus labios y mi lengua penetra su boca
Sus pezones delatan a través de la tela el deseo que le embarga
La boca desciende mordiendo las rosas que adornan las copas de sus pequeñas tetas haciendo de sus pezones juguetes de mis dientes
Mis uñas se clavan en sus nalgas abiertas y su sexo se moja
Gime, siente mis manos, mis caricias, mi deseo, susurra…

hazme tuya, tómame, úsame…

Ahora No. Hay cosas que hacer. Quizá más tarde.

Le pongo el tanga blanco de hilo dental. Apenas tapa su coño depilado. Tomo mi bolso y le doy el suyo.

Al auto. Saldremos.
¿Asi? ¿A dónde vamos?
No hay respuesta de mi parte
¿Saldrás vestida así?
¿Qué con mi forma de vestir?
Bueno es que esa blusa es muy reveladora y el pantalón muy ajustado…
Vamos camina. Le doy las llaves. Tu conduces
Ni que decir que al hacer los cambios mostraba la ricura de sus muslos.
¿A dónde vamos?
Conduce por la avenida yo te guio.

Después de un rato le ordeno aparcar en una farmacia. El estacionamiento está solo, debe haber poca gente en el negocio. Son las diez de la noche pasadas. Antes de descender pellizco sus pezones para erectarlos. Bajamos juntas y le digo me acompañe al mostrador. El dependiente un hombre de mediana edad unos 45 años se nos queda viendo al igual que el guardia privado que cuida la puerta del negocio. Les llama más la atención lila que YO. Sus pechos se dejan adivinar abajo de la blusa, sus pezones se marcan en la tela.
Necesitamos unos preservativos por favor – le digo al dependiente—
Lila se pone roja, el dependiente se corta un poco y pregunta de que tipo.
Los mejores que tengas, No hay que arriesgarse
Regresa con un paquete de los que contienen tres preservativos.
No, necesitamos una buena dotación dame una caja de 10 paquetes, ¿sabes? tenemos varios clientes para esta noche
Lila si fuera blanca estaría como cereza madura.
Regresa el dependiente.
¿tendrás de los comestibles?
No esos los encuentras en las sex shops aquí no. (el tipo se ha creído el cuento, empieza a tutearnos)
Dame una botella grande de enjuague bucal y unas pastillas de menta por favor. Ah y dos tubos de lubricante
¿algo más?
Si, ¿a que hora sales cariño?
A las 6.00 de la mañana.
MMM... A esa hora nosotras también vamos a dormir. Te gusta lila ¿verdad? No le quitas los ojos de encima.
Bueno es que,,,
No te apenes es natural, esta buena y muy cachonda, aunque es algo tímida aun, apenas empieza en esto. El día que gustes puede darte un servicio completo (le guiño un ojo) hace de todo, oral, anal, lésbico tu sabes.
Jajaja risa nerviosa del dependiente.
Le extiendo un billete, se cobra (veo que se siente aliviado de que la conversación termine) me da el cambio y le digo a lila en voz alta:
Anda que es tarde, nos esperan ya. Te tocaran dos a ti y uno a mi. Así solicitaron el servicio.
Me susurra “AMANDA caray”.
Me detengo a ver una crema en el estante del pasillo para aprovechar y decirle:

adelántate tres pasos al salir. Te agachas de tal forma que el guardia y yo podamos verte el trasero.
“Amanda” (susurra)
Obedece perra.
Hace lo que le ordeno, subimos al auto y empiezo a reír.
Estás loca, loca, mira que pudo haber alguien que nos conozca.
Vamos lila, la próxima vez quiero que me sigas el juego. Después de todo fue divertido ver los ojos con que te veía el tipo. Si nos quedamos sin trabajo ya sabes que si la haces para mantenerte jajajajaja
Anda vamos a casa, esto apenas empieza.

AMANDA

Domina