Leyendo por ahí me encontré un post en un foro con un titulo muy original. Si mal no recuerdo era algo como:
"EL AMOR HACE BLANDOS A LOS DOMINANTES"
Se hacia referencia como lo indica el titulo a que cuando en una relación BDSM se involucra el amor, el dominante no puede en un momento dado ser lo estricto que debe ser en cuanto al cumplimiento de sus ordenes.
La Dominación/sumisión, la relación Dominante/sumiso a mi forma de ver es por si sola muy especial. En ellas puede haber o no diferentes prácticas añadidas a lo que supone este tipo de relación por si misma. Puede haber una relación Dominante/sumisa sin haber nada más. No dolor, no exhibición, no sexo, etc. Cada relación de este tipo es única y es imposible generalizar. En este caso no veo como el amor puede influir en que se ordene o no algo o se permita que no se cumpla.
Si vamos más lejos tomando los comentarios ya de forma más puntual, vertidos en el mismo foro por algunos participantes sobre otras prácticas en concreto, como uno en que se decía que el amor impedía de alguna forma que los azotes fueran de igual forma que cuando no había amor, o la tortura o que se yo, pues caemos en la misma situación. Cada caso es único y es imposible generalizar.
Tendiendo en cuenta esto quiero hablar un poco de la relación que conozco y de la que puedo comentar. De la relación de Amanda y lila.
Es una relación donde hay amor, pero donde también hay dominio y sumisión.
En el caso nuestro quizá porque primero fue el amor y después el dominio y la sumisión, no siento que lo que se afirma que me vuelve debil como Dominante sea lo correcto.
Lo que hay que distinguir es cuando se hace una sugerencia, se expresa un deseo, se pide algún favor como pareja amorosa y cuando se da una orden como Dueña. Si como pareja algo se hace mal, o se equivoca una de las dos, o hace algo que la otra se pueda sentir o cuestionar, creo que debe tomarse así, en el contexto de asuntos de la pareja. Como Dueña y esclava la cosa es diferente. Yo mando, lila obedece y punto.
Es muy parecido a una relación de trabajo. Yo puedo ser muy buena amiga de mi asistente, convivir, hablarnos familiarmente, hacernos bromas, etc. Fuera del trabajo.
Pero en el trabajo yo soy su superior y debe guardar las formas. Si se equivoca no estaré regañando a la amiga, estaré llamándole la atención sobre una cuestión de trabajo a la asistente Muchas relaciones laborales se deterioran cuando alguna de las partes no esta conciente de que el trabajo es trabajo y la amistad es la amistad.
De igual forma veo yo, el poder combinar el amor con el BDSM o la dominación y sumisión
Nos ha costado muchos problemas, sinsabores, sentimientos el poder comprenderlo y manejarlo de esta forma, En ocasiones aun nos pasa. Tratamos de solucionar esto hablando claro. Si lila tiene una duda en que plan le digo algo, me pide le aclare.
No creo ser blanda, quizá me ayude que soy sádica lo reconozco y que lila al ser masoquista también ayude con eso.
E independientemente de esos dos factores otra cosa que me ayuda a no ser blanda es el que estoy conciente de que a lila le gusta servirme, darme gusto, ser mía. Y a mi me encanta ser dominante.
Por otra parte lila no es un felpudo, lila me representa un reto continuo y constante que hace que como su Dueña me esfuerce con el fin de no quedarme atrás de sus avances.
Pero a fin de cuentas esto es solo mi opinión sobre lo que Yo vivo como Dominante, como Dueña y como amante de lila
AMANDA
Domina